lunes, 10 de diciembre de 2012

Me odio...


Sí. Así de simple.

Hace mucho tiempo que no pasaba por aquí. Los motivos son varios, pero la falta de tiempo y el exceso de trabajo se llevan con creces el primer lugar.

Hoy he tenido una batalla campal con mi cuerpo y mi mente. Y eso me tiene aquí, con insomnio y un trozo de torta de chocolate. No puedo creer que en 29 años todavía no logre quererme. Me he tratado tan mal hoy... y sigo sintiendo que debo tratarme peor, porque no me merezco tratarme bien... supongo que son cosas que me he metido sola en la cabeza y llevo años intentando saber por qué me hago este daño tan enorme... pero no he dado con la respuesta... :(

Supongo que todos tenemos complejos con nuestro cuerpo. Pero a veces siento que llevo los míos a los extremos. (Creo que) jamás me he hecho daño físico, pero el maltrato psicológico que puedo llegar a autoinfligirme destrozaría a muchas personas...

Mis senos. Para mí son un tema demasiado complejo. Después de haber perdido más de 15 kilos y apenas una talla de bra, me resigné. Lo mío no era un problema de kilos extra... lo mío era simplemente mi genética. Y desde entonces no paro de torturarme. Para mí es horrible ir a una tienda y simplemente tener que conformarme con "lo que hay". No puedo tener un bra bonito como el que compraría cualquier chica de mi edad. Tengo que conformarme con el feo y enorme que hay en mi talla (cuando hay). Tal vez un hombre no lo entienda (tampoco pido que lo entiendan), pero las mujeres sí que sabemos de qué manera la ropa interior influye en nuestra propia autoestima, en el hecho de sentirnos sexy o simplemente cómodas con nuestra feminidad. Tampoco hay derecho a trajes de baño ni a playeras bonitas, ya que al ser talla M de cintura y XXL de senos las opciones son casi nulas. Pero no sólo me afecta en la ropa. A veces también siento deseos de correr y no puedo, porque estas dos enormes "cosas" no paran de rebotar y hacerme sentir muy pesada. Y finalmente, lo que más me duele... es tan difícil caminar por la calle y ver que muchas veces los hombres no dejan de mirarte... me hace sentir tan sucia, como un objeto, como basura... no se lo doy a nadie. Porque no te dicen cosas agradables... te dicen cosas que te denigran... y la impotencia es tan grande...

El sobrepeso. Otro de mis "pesados" problemas. Cualquier persona que jamás ha lidiado con este problema pensará que es cuestión de cerrar la boca y ya está. Los que lo hemos sufrido toda la vida, sabemos que no es así. En mi experiencia personal, la comida rige mi vida. En el último tiempo, todavía no termino de tomar desayuno cuando pienso en lo que voy a almorzar y a cenar. Me obsesiono cuando quiero comer un chocolate o unas papas fritas y me pongo de pésimo humor si no consigo comer lo que quiero, cuando quiero. Soy tan adicta a la comida como cualquiera de esas personas que muestran en los programas para perder peso. Me doy atracones, pero no me siento culpable. Cada vez que tengo dinero en mis manos pareciera que no puedo evitar gastarlo en comida. Puedo alimentarme bien, sanamente gran parte del día, pero en 20 minutos lo echo todo a perder... y no por hambre, sino por impulso. Y cuando logro perder algo de peso, lo peor que pueden decirme es que me veo más delgada y que estoy guapa, porque mi subconsciente se activa al instante diciéndome que eso "está mal" porque yo no soy así... y vuelvo a comer... antes tenía mucha fuerza de voluntad, pero pareciera ser que en el último tiempo desapareció... llevo al menos un mes intentando ponerme más estricta para perder peso, pero no he logrado hacer bien un solo día... y veo que mi novio pierde peso rápido, y en vez de motivarme, me desanima más... y como más... veo a las niñas que pierden peso en los programas... a las amigas de la escuela que también lo lograron (y que además han logrado mantenerse con el tiempo)... ¿por qué yo no puedo? ¿por qué para mí tiene que ser tan difícil? ¿qué hay de malo en mí que me impide lograrlo? ¿acaso será que de verdad no me lo merezco?

A veces, pareciera que mi mente me tiene viviendo una pesadilla constante, donde me castigo tanto, que tratarme o que me traten bien está mal visto porque soy tan fea, gorda y patética, que no soy digna de que me traten bien. Sinceramente, a veces me encantaría que alguien se diera cuenta de lo que me pasa, de cómo me ahoga todo esto... y me ayudara. Pero pareciera que cuando intento decir algo las personas no me creen o piensan que lo exagero... entonces, finalmente termino por sentarme... y comer... y llorar... y escribir. ¿Acaso será que tengo que recurrir a algo extremo para que los que me rodean se den cuenta de lo mal que estoy, de lo poco que me quiero y de la basura que me siento? Lo siento, pero atentar físicamente contra mí, no es lo mío... y menos para llamar la atención... así que supongo que tendré que seguir guardándome mis pensamientos hasta que alguien logre darse cuenta de que no puedo hacerlo sola...